El
23 de diciembre de 1947, Walter H. Brattain y John Bardeen, demostraron
el efecto amplificador del primer transistor en los Laboratorios de
la Telefónica Bell. El transistor sustituyó al tubo de
vacío, ya que era más pequeño y ligero, no requería
de filamentos y tampoco tenía perdidas térmicas. Resultaba
más eficiente porque consumía menos energía.
El transistor es un dispositivo conformado (en su mayoría) de
tres que reciben el nombre de emisor, base y colector. Estos dispositivos
están hechos de silicio o germanio.