En este artículo me interesa abordar las formas en que algunos de los
dispositivos tecnológicos a través de los cuales se produce arte
“dejan pasar” al sujeto.
Desde las primeras máquinas de hacer imágenes como la camera
oscura, hasta la fotografía y el cine. Y más allá,
si pensamos en el arte como tekhné, “como una serie de reglas
por medio de las cuales se produce algo”, como “una habilidad mediante
la cual se hace algo, generalmente se transforma una realidad natural en una
artificial” ; entonces la idea de dispositivo va todavía más
allá de la máquina, la incluye igual que a otras tecnologías
más simples e incluso al programa o poética del artista. Aunque
hay que analizar esto con más cuidado, por ahora servirá para
poder desarrollar esta idea.
El dispositivo, “transforma una realidad natural en una realidad artificial”
. Antes de ceder ante el antojo de hablar sobre la oposición natural/artifical,
me parece importante hacer énfasis en una parte muy importante de esta
definición: realidad, y aunque ante ese antojo sí, no cederé;
su sola presencia en la definición, es clave. Desde los griegos hemos
sido concientes de que cuando hacemos arte, producimos realidad. Y como somos
una cultura que está poco a poco dejando de creer en la “verdad”
o ya por lo menos la ponemos entre comillas casi siempre, asumiré que
la realidad que creamos con los dispositivos es ficción pura (y también
porque así me gusta pensarlo), entonces, es posible usar el término
“dispositivo ficcional” .
Ahora, estos dispositivos, no quiero decir: son utilizados, (porque también,
por cuestión de preferencias, no me gusta la definición instrumental
de la técnica) y para no decirlo, prefiero pensar que los atravesamos
o que nos “dejan pasar”, es decir, al sujeto artista, de una cierta
manera.
Kino Eye, el programa; una cámara de cine; un cameraman; Dziga Vertov;
toda la realidad: El hombre de la cámara. “Un film sin la ayuda
de sets”; “un film sin actores”; “un film sin subtítulos”.
El camarógrafo tiene un rol en la película, posee agencia en el
sentido aristotélico de “aquél quien inicia una acción”,
no es testigo o voyeur, es parte de.
Vertov exploró las posibilidades de la relación del autor con
el aparato y del aparato con la realidad. Sin embargo no es un sujeto tratando
de ser “objetivo” en mostrar lo que ve, es un autor cuya subjetividad
trata con fuerza de atravesar el aparato.
Si ya un dispositivo tan “aparentemente” simple como el espejo, como
dice Lacan, nos muestra una visión ortopédica de la realidad,
nos permite entrar en ella, en el reino de lo simbólico, del lenguaje,
pero a partir de un error de percepción; cuánto más ortopédica
será la visión de la cámara. De qué maneras “deja pasar” al sujeto, y cómo el sujeto
autor o el camarógrafo, lucha con ella, resiste, la fuerza para convertirla
en lo que “no es”. Hay grandes posibilidades en esa relación
de tensión entre sujeto y dispositivo, antes de imponer una historia,
antes de usar actores, antes de construir un set, mucho antes. Siempre está la forma “oficial” de pasar a través del
aparato, la que indican las instrucciones y la tradición, la forma en
que la propia interfaz nos lo indica, entre más amigable, quizá,
más oficial.
Del espejo, a la cámara hay un abismo de complejidad, sobre todo técnica;
de la cámara a la computadora hay otro. El primero es un dispositivo
óptico, el segundo es además mecánico y electrónico
(en principio) y el tercero es propiamente una máquina compleja.
¿Cómo este dispositivo o aparato ficcional complejo deja pasar
al sujeto? En este y otros próximos artículos, trataré
de rastrear este proceso según las ideas de algunos teóricos de
los nuevos medios.
Según Vilem Flusser, hemos sido forzados a una transición de sujeto
en proyecto. En Digital Apparition, se pregunta acerca de las razones
de nuestra desconfianza frente a las imágenes generadas en la computadora.
Precisamente no las llama virtuales o simulación por no caer en la dicotomía
realidad/simulación. Plantea dos respuestas a su pregunta, la primera
es que son elementos formados por puntos, sostenidos en la nada; la segunda,
que las hemos hecho nosotros, que son artificio, arte, y “el arte es bello,
pero es mentira”. Es evidente que esta duda es por lo menos tan antigua
como los griegos, pero él marca la modernidad como el clímax de
la desconfianza acerca de la realidad. Cuando el hombre moderno se dio cuenta
que la realidad es indescriptible e inimaginable pero calculable y más
tarde descubrió que quizá las leyes naturales no eran verdades
si no ecuaciones impuestas sobre la naturaleza. La computadora permite no sólo
calcular a una velocidad extremadamente rápida si no construir, proyectar
espacios y seres artificiales.
La idea de Flusser gira en torno a que la realidad está conformada por
objetos con mayor o menor “densidad de puntos”, tanto los mundos generados
en la computadora como la realidad que consideramos tangible; y que cuando un
holograma, por ejemplo, posea la misma densidad de puntos que “esta mesa”
entonces no vamos a hacer la distinción real/artificial entre las dos,
porque en ese sentido, no la hay.
“Lo que llamamos real, lo que además percibimos y experimentamos
como tal, son aquellas áreas cuyas curvaturas y convexidades en las que
las partículas se distribuyen más densamente y en las que las
potencialidaes son realizadas. Esta es la imagen digital del mundo, como nos
está siendo sugerida por la ciencia y presentada a nuestros ojos por
las computadoras. Tendremos que vivir con esto de ahora en adelante nos guste
o no&ÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿÿ |